19/6/08

Greguerías I

El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero.

En la manera de matar la colilla contra el cenicero se reconoce a la mujer cruel.

Cuando sentimos un diente flojo no hay nada que hacer como cuando notamos que se mueve la punta del lápiz.

Los que vienen de la lluvia traen cara de vaso de agua.

Roncar es tomar ruidosamente sopa de sueño.

Los presos a través de la reja ven la libertad a la parrilla.

Al caer la estrella se le corre un punto a la media de la noche.

Trueno: caída de un baúl por las escaleras del cielo.

El arco iris es la cinta que se pone la Naturaleza después de haberse lavado la cabeza.

Las flores que no huelen son flores mudas.

Las palmeras tienen la nuca afeitada.


Ramón Gomez de la Serna (1888-1963) vivió exclusivamente para la literatura. Escribió poemas, cuentos, novelas, ensayos y biografías; fue periodista. Desde 1936 hasta su muerte vivió en la ciudad de Buenos Aires. Su máximo logro creativo fue inventar el género greguería. La greguería se obtiene de mezclar reflexión intelectual y observación profunda de la realidad. Es un ejercicio imaginativo que, como advierte el Propio Gómez de la Serna, debe contar con dos elementos básicos: humor y metáfora. Acá y acá les dejo dos páginas excelentes dedicadas al estudio y divulgación de la vida y obra del gran Ramón Gómez de la Serna.

1 comentario:

RosazuL dijo...

El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero