24/6/08

Ecosistema

El día de mi cumpleaños, mi sobrina me regaló un bonsai y un libro de instrucciones para cuidarlo. Coloqué el bonsai en la galería, con los demás tiestos, y conseguí que floreciese. En otoño aparecieron entre la tierra unos diminutos insectos blancos, pero no parecían perjudicar al bonsai. En primavera, una mañana, a la hora de regar, me pareció vislumbrar algo que revoloteaba entre las hojitas. Con paciencia y una lupa, acabé descubriendo que se trataba de un pájaro minúsculo. En poco tiempo el bonsai se llenó de pájaros que se alimentaban de los insectos. A finales de verano, escondida entre las raíces del bonsai, encontré una mujercita desnuda. Espiándola con sigilo, supe que comía los huevos de los nidos. Ahora vivo con ella, y hemos ideado el modo de cazar a los pájaros. Al parecer, nadie en casa sabe dónde estoy. Mi sobrina, muy triste por mi ausencia, cuida mis plantas como un homenaje al desaparecido. En uno de los otros tiestos, a lo lejos, hoy me ha parecido ver la figura de un mamut.

José María Merino es el autor de este cuento. Es español y un excelente cuentista. Nació en 1941 en La Coruña. Acá hay otros cuentos breves y acá una extensa reseña que le va a venir bien a quien no conozca al autor y quiera ver por dónde va su estilo.

19/6/08

Greguerías I

El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero.

En la manera de matar la colilla contra el cenicero se reconoce a la mujer cruel.

Cuando sentimos un diente flojo no hay nada que hacer como cuando notamos que se mueve la punta del lápiz.

Los que vienen de la lluvia traen cara de vaso de agua.

Roncar es tomar ruidosamente sopa de sueño.

Los presos a través de la reja ven la libertad a la parrilla.

Al caer la estrella se le corre un punto a la media de la noche.

Trueno: caída de un baúl por las escaleras del cielo.

El arco iris es la cinta que se pone la Naturaleza después de haberse lavado la cabeza.

Las flores que no huelen son flores mudas.

Las palmeras tienen la nuca afeitada.


Ramón Gomez de la Serna (1888-1963) vivió exclusivamente para la literatura. Escribió poemas, cuentos, novelas, ensayos y biografías; fue periodista. Desde 1936 hasta su muerte vivió en la ciudad de Buenos Aires. Su máximo logro creativo fue inventar el género greguería. La greguería se obtiene de mezclar reflexión intelectual y observación profunda de la realidad. Es un ejercicio imaginativo que, como advierte el Propio Gómez de la Serna, debe contar con dos elementos básicos: humor y metáfora. Acá y acá les dejo dos páginas excelentes dedicadas al estudio y divulgación de la vida y obra del gran Ramón Gómez de la Serna.

16/6/08

A la sombra de mi sombra

A la sombra de mi sombra
me estoy haciendo un sombrero,
sombrero de largas pajas que he recogido del suelo.
Lo haré con el ala ancha
que casi llegue hasta el cielo,
“pa” muchas veces no ver
las cosas que ver no quiero.
No quiero ver injusticias ni miserias.
No quiero ver militares ni princesas.
No quiero ver dictaduras ni pobrezas.
No quiero ver religiones ricas ni reinas.
Que sólo quiero yo ver a los pobres sin miserias,
a los ricos sin dinero desnudos en esta tierra,
a infinitos corazones
unido por el amor y unidos contra la guerra.

A la sombra de mi sombra
me estoy haciendo un sombrero,
pero voy a dejar de hacerlo
para luchar con dos “güevos”.

Luego de estos días de ausencia vengo con un poema de Manolo Chinato. Poeta español más conocido en el mundo del rock que en el de la literatura. Un verdadero marginal rescatado por el grupo español Extremoduro, a quién acompaña como telonero de sus conciertos. Se hizo conocido por el disco "Poesía Básica" de Extrechinato y Tu, grabado conjuntamente con algunos integrantes de los grupos Extremoduro y Platero y Tu. Si leen este artículo y este otro podrán hacerse una idea de quién es Manolo Chinato. Y acá hay información sobre el proyecto musical Extrechinato y Tu. Pero sobre todo les sugiero que escuchen uno de sus recitales en Youtube.

5/6/08

Bomba psi

El choque de las dos polaridades, escribió inexacta pero dramaticamente un divulgador, surte un efecto similar al del bombardeo con neutrones en las bombas de fisión. El resultado es un hongo psíquico.
Para simplificar comparémoslo con una transmisión televisiva, dijo el oficial de Comunicaciones, tal vez repentinamente inspirado por la cámara que tenía delante. Hay una cámara, dijo en efecto el oficial, que capta una imagen. La imagen sale al aire en forma de ondas electomagnéticas. Las ondas son captadas por la antena y reaparecen en la pantalla como imágenes. La imagen del oficial, obedeciendo a esta explicación precaria, salió al aire, bajó por miles de antenas, reapareció sonriente en miles de televisores para pasar de la primera simplificación a la segunda. Nuestro amplificador de sueños equivale a la cámara, dijo sin convicción el oficial. Se instala en las líneas, capta ondas emitidas por los soldados dormidos. Las envía al aire. El equivalente de las antenas son los sentidos de otros seres humanos. Ven, sienten las imágenes creadas por esos sueños. El oficial abrió los ojos. No son alucinaciones, pero no tienen existencia "real", aclaró. No pueden fotografiarse, filmarse ni grabarse, añadió con voz nerviosa. No las registra el radar ni el sonar. Pero pueden causar un efecto material en las víctimas.

Este fragmento lo saqué del cuento "Escalada" de Carlos Gardini. Pertenece a su primer libro de cuentos "Cerebro animal" (1983), repleto de historias violentas e imaginativas. Gardini es el único referente argentino que goza de cierta relevancia en los ámbitos de la ciencia ficción y la fantasía. Su escritura es directa y visual. En la actualidad tiene 60 años y sigue escribiendo. Lo último que publicó es "Fábulas invernales" (2004), una serie de relatos conectados entre sí en los que aparecen humanos, vampiros, grifos, sirenas, mantícoras y una larga lista de extraños personajes. Otra gran muestra de su imaginación poderosa. Los que gustan de la ciencia ficción y la fantasía y no lo conocen pueden ver algo acerca de él y su obra acá y acá. Hasta la próxima.

2/6/08

AYYYYY

Sonó el timbre y ella fue a abrir la puerta. Era su marido.
-¡Ayyyyyyy! -gritó ella- ¡pero si vos estás muerto!
Él sonrió, entró y cerró la puerta. Se la llevó al dormitorio mientras ella seguía gritando, la puso en la cama, le sacó la ropa e hicieron el amor. Una vez. Dos veces. Tres. Una semana entera, mañana, tarde y noche haciendo el amor divina, maravillosa, estupendamente.
Sonó el timbre y ella fue a abrir la puerta. Era la vecina.
-¡Ayyyyyyy! -gritó la vecina- ¡Pero si vos estás muerta! -y se desmayó.
Ella se dio cuenta de que hacia una semana que no se levantaba de la cama para nada, ni para comer ni para ir al baño. Se dio vuelta y ahí estaba su marido, en la puerta del dormitorio:
-¿Vamos yendo, querida? -dijo y sonreía.

Como había prometido hace un tiempo, hoy les dejo un cuento de Angélica Gorodischer. Considero que, junto con Alberto Laiseca, es una de las escritoras argentinas que más imaginación demostró tener. Y tiene. Porque está viva y en 2009 cumplirá 80 años. Hace un par de meses atrás, en marzo, se editó su nueva novela "Tres colores".
"Ayyyyy" pertenece a su libro de cuentos "Menta", editado en el año 2000. Y si bien el cuento no es una rareza es algo atípico en Gorodischer la híper brevedad. Tiene, eso sí, muchos cuentos cortos, obras maestras, clases magistrales de técnica narrativa. Y tiene también novelas originales y fantásticas con personajes indelebles. El que quiera descubrir el mundo de Angélica Gorodischer encontrará acá una entrevista que revela parte de su pensamiento. Y acá, una buena cronología de su vida, su obra, más textos, video y audio de la escritora.